Cambia la tecnología, cambia el momento. Al contrario de lo que se consideraba en el pasado, la vida ya no se vive en años, días u horas. Los dispositivos móviles alteran la manera de cómo vivimos, experimentamos la realidad y lidiamos con el factor tiempo. La vida ha pasado a ser vivida en momentos breves, independientes y únicos.
La era digital ha revolucionado el acceso a la información, la forma de relacionarnos, pero, sobre todo, ha transformado la variable tiempo. Como consecuencia de esta alteración temporal, el comportamiento del consumidor ha cambiado irremediablemente. El uso cada vez más frecuente de dispositivos móviles que permiten el acceso inmediato a la información, conlleva un nuevo desafío a las marcas. Cada momento constituye una oportunidad crucial para conquistar la atención del consumidor e influir en sus decisiones y preferencias.
Según estadísticas de Google, el 94% de los usuarios de smartphones buscan información en sus dispositivos mientras realizan otra tarea. Ahora es posible, por ejemplo, estar en una tienda de una determinada marca y querer saber más sobre un producto o servicio. Nos encontramos en un nuevo contexto con multitud de dispositivos móviles como portátiles, teléfonos móviles o tablets, que contradicen la previsibilidad de los desktops, aportan mayor autonomía, facilidades y poder de decisión al individuo, aumentando, incontrolablemente, la exigencia del mismo.
De esta manera, las acciones serán cada vez menos previsibles y las decisiones serán tomadas en momentos de impulsividad, respondiendo a una necesidad que surge ese preciso momento. Las interacciones fragmentadas aumentan el desafío de los profesionales de comunicación y marketing, los cuales no solo deberán captar la atención de los consumidores a través de contenidos interesantes y atractivos, sino que también tendrán que estar presentes en aquel instante en el que los usuarios estén receptivos a los mensajes.
En este contexto, asociado a los “micromomentos” se encuentran los “microinfluenciadores” – personas comunes como youtubers, instagramers obloggers, que se convierten en especialistas de un determinado sector que pueden conquistar a un grupo fiel de seguidores, que serán el público objetivo a abordar, pero de una forma más rápida y eficaz. En esta dinámica actual, en la que el tiempo dedicado a cada tarea es mínimo, todo se vive en el momento o, mejor dicho, en el “micromomento”. La batalla por la conquista de la atención al consumidor se gana o se pierde en instantes – de querer saber, hacer o comprar –, siendo estos agentes piezas fundamentales para moldear preferencias y potenciar el alcance de la marca en las redes sociales.
Con todas las alteraciones que se han producido en el mercado, las empresas que quieren invertir en la relación con sus consumidores deben ser conscientes de que estos “micromomentos” representan el nuevo campo de batalla para conquistar clientes, pudiendo ser exitosas si son capaces de atender las necesidades y conectarse con el consumidor en el momento exacto en el que se encuentra. Con este panorama, se espera que la calidad, eficacia y relevancia del marketing sean mayores que nunca, ya que, al final, la marca que gana es aquella que está atenta y consigue corresponder a la expectativa del cliente en un “micromomento”.
Por Joana Carravilla
Country Manager Iberia de E.life